Una de las patologías más comunes en los gatos es el estreñimiento. Son varios los síntomas que evidencian este problema pero, en caso de duda, la mejor opción siempre será la del veterinario. Éste nos explicará qué se necesita para una mejora inmediata, dándonos indicaciones para que no suceda de nuevo. Si nos ha pasado más veces, la consulta no hará falta. Nosotros podremos cuidar a nuestro felino personalmente haciendo especial hincapié en su bandeja sanitaria: es aquí dónde observaremos la deposición diaria. Otro signo revelador de que algo no va bien puede ser el estado del minino.
Ante un caso de estreñimiento, es importante barajar posibles causas que han podido influir en el desarreglo biológico de nuestra mascota. Medicamentos, cambios ambientales o de conducta pueden convertirse en posibles causantes de la anomalía. Cualquier espacio diferente al del día a día puede suponerle estrés y, como consecuencia, provocarle estreñimiento. La posible ingestión de objetos también es motivo de preocupación si nuestra mascota no puede defecar, ya que ha podido intoxicarse.
Ante un caso de estreñimiento, es importante barajar posibles causas que han podido influir en el desarreglo biológico de nuestra mascota. Medicamentos, cambios ambientales o de conducta pueden convertirse en posibles causantes de la anomalía. Cualquier espacio diferente al del día a día puede suponerle estrés y, como consecuencia, provocarle estreñimiento. La posible ingestión de objetos también es motivo de preocupación si nuestra mascota no puede defecar, ya que ha podido intoxicarse.
Existen diferentes causas por las que es posible que tu gato padezca estreñimiento. La dificultad de defecar en un periodo largo hace que nuestra mascota muestre cambios físicos y de comportamiento debido a la incomodidad que esto le supone. El problema de expulsión de las heces se traduce en dolor, que suele ir unido a la acción de orinar también.
Por otra parte, la escasa o nula actividad del gato predispone a que existan defecaciones infrecuentes debido a la ralentización intestinal. En el momento en que el felino reduce su ejercicio, su sistema intestinal se desacelera y se produce la imposibilidad de transportar los desechos hasta el recto. Igualmente, al no moverse diariamente, corre el riesgo de engordar y producir un mayor volumen de los mismos.
Estos síntomas pueden llevarnos en ocasiones a la confusión, puesto que no siempre estaríamos ante un caso de estreñimiento. Dolencias como la colitis o el síndrome urinario felino comparten las primeras manifestaciones en el animal y sus raíces son casi las mismas. Tendríamos que hacer una distinción antes de tratar a nuestro amigo.
Por otra parte, la escasa o nula actividad del gato predispone a que existan defecaciones infrecuentes debido a la ralentización intestinal. En el momento en que el felino reduce su ejercicio, su sistema intestinal se desacelera y se produce la imposibilidad de transportar los desechos hasta el recto. Igualmente, al no moverse diariamente, corre el riesgo de engordar y producir un mayor volumen de los mismos.
Estos síntomas pueden llevarnos en ocasiones a la confusión, puesto que no siempre estaríamos ante un caso de estreñimiento. Dolencias como la colitis o el síndrome urinario felino comparten las primeras manifestaciones en el animal y sus raíces son casi las mismas. Tendríamos que hacer una distinción antes de tratar a nuestro amigo.
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1 comentario:
Existen remedios naturales para perros y gatos que contienen una mezcla de remedios herbarios y de sales bioquimicas seleccionados especialmente para apoyar la salud del intestino en perros y gatos, mantener el intestino sano y evitar el estreñimiento.
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